Está claro que en Aranjuez hay muchos deberes pendientes y todos deben encaminarse a la dinamización de la ciudad en todas sus posibilidades. La industria ha quedado reducida a la mínima expresión, el sector primario se sabe que es sacrificado, y aunque la vega ribereña es realmente rica y podría ofrecer muchas posibilidades tampoco es la situación ideal. Así que queda el sector servicios que debería sustentarse gracias al consumo de la ciudadanía y al que se generaría por el turismo, en el que deberíamos centrarnos para aumentar la riqueza de nuestro municipio.
El problema no es solamente que los jardines estén cerrados por los coletazos de la tormenta del 30 de agosto que aún arrastramos, y que arrastraremos. El verdadero problema es que el turista que viene a Aranjuez pasea, se maravilla pero no aporta riqueza, ya que es turismo de bocadillo debajo del brazo o luego continúan ruta y comen en Chinchón.
El problema no es solamente que los jardines estén cerrados por los coletazos de la tormenta del 30 de agosto que aún arrastramos, y que arrastraremos. El verdadero problema es que el turista que viene a Aranjuez pasea, se maravilla pero no aporta riqueza, ya que es turismo de bocadillo debajo del brazo o luego continúan ruta y comen en Chinchón.
Para que su visita redunde en Aranjuez es necesario buscar las fórmulas para que paseen por sus calles, que visiten su centro, que los comercios puedan mostrar sus posibilidades y su forma de atender al cliente… Es necesario ofrecer opciones diferentes y publicitarlas, no sólo a nivel municipal sino autonómico. Tenemos potencial, tenemos recursos, pero aún no se ha encontrado la forma de dinamizar nuestro pueblo creando riqueza real. Ls personas que vivimos aquí no somos conscientes de la belleza real, aunque vemos algunas fotos de artistas que tenemos en nuestro pueblo y nos maravillamos nuevamente, y es que lo que se ve todos los días no se aprecia. Pero esas corralas, esos palacetes, esas iglesias, esos rinconcitos mágicos……Todo el arte que tienen nuestras gentes en muchas disciplinas y esas posibilidades de creación que otorga su imaginación.
Existen mil opciones pero por diferentes razones no se ponen en marcha. Creo que se tiene un problema generalizado y es el de poner muchas opciones sobre la mesa, incluso muy buena ideas, pero al final no se buscan las opciones para realizarlas. Además somos una sociedad educada en la competición y no en la colaboración, de forma que no se exponen ideas porque me las pueden pisar, o lo imitaran, o si las promueven estos yo no colaboro….a veces vivimos en el mundo al revés, perjudicándonos nostr@s mism@s por razones equivocadas.
Muchos deberes pendientes, mucha necesidad de análisis, innovación, creatividad, diálogo, cooperación…….y todo eso encaminado a un mismo fin: Aranjuez. Nadie dijo que fuera fácil pero creo que existen opciones para conseguirlo.
Laura Barreiro Marañón
Miembro de ACIPA
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